La miel es uno de los alimentos más preciados por los humanos. Es nutritiva, deliciosa, posee propiedades medicinales y es un alimento que puede durar mucho tiempo sin estropearse. Pero te has preguntado alguna vez ¿Cómo hacen las abejas la miel? Si hemos acertado entonces te interesará seguir leyendo pues a continuación te mostraremos como llevan a cabo las abejas el elaborado proceso de producir el único alimento hecho por insectos que es consumido en todo el mundo.
La colonia de abejas y una sociedad altamente organizada
En primer lugar debes saber que una colmena de abejas es una sociedad altamente organizada. Cada abeja en el panal, que muchas veces estará compuesta por unas 40 o 50 mil abejas, desempeña un rol bien definido en su sociedad.
Durante los meses de verano, cuando abunda el néctar y el polen, las abejas obreras (todas las hembras del panal) son las encargadas de volar durante muchos kilómetros para recolectar el néctar de las flores, materia prima esencial para la elaboración de la miel.
Las abeja obreras debe visitar hasta 2 millones de flores para fabricar 1 libra de miel.
Pero no todas las obreras recolectan polen. De igual forma, muchas obreras también pudieran hacer un cambio de roles y desempeñar otros trabajos dentro de la colonia. Todo este proceso es instintivo y podrán hacerlo de forma espontanea sin que otra abeja se lo exija.
Entre estos otros roles podemos encontrar limpiadores de colmenas, a las abejas nodrizas, las asistentes de la reina, las fabricantes de cera, abejas constructoras y reparadoras. También están las transportistas, las empacadoras de miel y empacadoras de polen.
Por último también existen abejas que poseen el rol de batir sus alas para regar la nueva miel y enfriar la colmena.
La reina y los zánganos
Por otro lado la abeja reina estará ocupada poniendo hasta 2000 huevos por día. De esta forma se mantendrá la población de obreras de la colonia.
Los machos de la colonia, denominados zánganos solo son necesarios en la sociedad de las abejas para fecundar a la reina. Pero al llegar el otoño, cuando las flores de marchitan y la producción de miel culmina, los zánganos son expulsados de la colmena para morir.
Al final de sus vidas (luego de unos 42 a 45 días después de su nacimiento) las obreras entran en una última fase de su vida en búsqueda de alimento. Esta fase dura aproximadamente 2 semanas. Después la obrera se retira de forma permanente y por lo general morirá fuera de la colmena.
Pero, ¿Cómo hacen las abejas la miel?
Como ya sabes, existen en la sociedad de abejas, obreras recolectoras que vuelan por varios kilómetros recolectando néctar. En este proceso de recolección la obrera succiona unas gotas del líquido y las deposita en una cámara en su estómago denominado estómago de miel.
Es necesario que la abeja obrera se pose sobre unas 1000 flores para llenar con néctar los 40 mg de volumen de su cámara de miel. Dentro e la abeja, en esta cámara el néctar es combinado con enzimas especiales y reaccionan y se descomponen en almidones y proteínas el néctar así como también en azúcares simples y complejos.
Una vez de regreso en la colonia, las abejas obreras recolectoras transfieren la miel de sus cámaras a las abejas de transferencia. Estas abejas nuevamente en sus cámaras del estómago continúan la acción enzimática iniciada por las recolectoras.
Finalmente, este néctar parcialmente digerido se deposita en las células de la miel del panal. No obstante en este punto, la miel todavía posee un elevado porcentaje de humedad por lo que si se expone directamente al aire se se fermentaría. En consecuencia una brigada de abejas obreras debe ventilar las celdas abiertas donde se ha depositado la miel hasta que la misma reduzca sus niveles de humedad hasta un 18% o menos.
Luego, la celda de miel ventilada es sellada con una fina capa de cera de abejas. Esta miel sellada ya estará lista para ser cosechada.
El perfeccionamiento de las técnicas de apicultura
Durante muchos años en la producción de miel comercial, los apicultores han utilizado varios diseños de colmena. Pero un diseño denominado Langstroth, en honor al pastor y apicultor estadounidense Lorenzo L. Langstroth es el más utilizado en la actualidad. Este diseño es una mejora de los diseños utilizados por varias generaciones de apicultores europeos.
Langstroth agregó varias otras mejoras bastante importantes al nuevo diseño y a mediados del siglo 19 obtuvo una patente para un sistema de marcos de madera móviles que caben dentro de unas cajas apilables.
En el diseño de las cajas no se contemplaba tapa ni fondo, para que de esta forma las abejas pudiesen tener libertad de moverse libremente entre ellas. Los marcos dentro de las cajas fueron cuidadosamente dimensionados y espaciados, esto con la finalidad de que las abejas construyeran un panal dentro de ellos en línea recta.
Con este diseño de marco se evita que las abejas opten por la construcción en forma de ondas complejas como lo han hecho en la naturaleza durante millones de años, pero que dificulta la recolección de la miel de forma óptima.
Proceso de recolección
De esta forma, un apicultor simplemente retira el marco de la caja y extrae la miel fácilmente raspando los tapones de cera de abeja cuidadosamente de la superficie del panal. A este proceso se le denomina «descortezado».
Una vez retirados los tapones de cera los marcos dejan gotear la miel. Luego se colocan en un extractor, que gira los marcos cuidadosamente dentro de una especie de centrífuga de acero inoxidable. Esta fuerza centrífuga vacía las celdas de miel y se envía a un tanque de almacenamiento.
Finalmente cuando los tanques de almacenamiento de las centrífugas están llenos, la miel se transfiere a unos bidones. Estos bidones de miel cruda se venden a las embotelladoras.
El apicultor finalizado este proceso luego devuelve el marco a la colmena donde las abejas lo repararan y lo reutilizan.
Este diseño de caja persiste hasta hoy en la misma forma y es utilizada por miles de apicultores alrededor del mundo.
La miel cruda posee una gran cantidad de enzimas, vitaminas y minerales beneficiosos para la salud.